jueves, 31 de enero de 2013

CÓMO CONSTRUIR UNA VIDA POSITIVA

 
 
Todos necesitamos sentirnos saludables y felices en la vida, satisfechos con lo que hacemos, con nosotros mismos. El pensamiento y las conversaciones internas positivas, nos ayudan a ir modificando nuestros comportamientos y emociones para ir construyendo un día a día mucho más positivo y optimista.
Para mantenernos saludables, hay que trabajar todos los días en esta dirección. Ejercitando nuestra positividad creativa vamos a ir notando como nuestra autoestima, nuestra confianza se van incrementando lo que nos va hacer sentir mejor con nosotros mismos y con nuestro alrededor.
Os invito desde Terapia Positiva a que pongáis en práctica estos ejercicios, veréis como vuestra vida cambia día a día prosperando positivamente.
Sonríele a la vida.
Sonríete a ti mismo, mira a través de la ventana y observa el cielo, las nubes o el sol y agradécele a la vida el nuevo día que te ofrece como un regalo maravilloso. Son 24h donde escribir tu vida. Escríbela con sentido del humor y alegría. La risa es una de las vías para crear una vida positiva.
 Recárgate de energía.
Toma un buen desayuno. Ingiere alimentos sanos que a ti te sienten bien y disfruta de la variedad de sabores que la naturaleza te ofrece. Sé consciente de que tienes la oportunidad de comer alimentos que en otras partes del mundo son incapaces de soñar pues ni tan siquiera los conocen. Cuídate, dedícate a ti mismo unos minutos, disfruta de tu higiene personal. Son momentos en los que te encuentras cara a cara con tu cuerpo tu más preciado vehículo. Cuídalo, escucha aquello que le gusta y mímalo, imprímele dulzura y amor.
 Valora las cosas positivas que posees.
Concéntrate en las cosas que tienes en este momento, no en las que te faltan. Esto solo te hará sentir cierto grado de frustración y desilusión, estarás perdiendo tu precioso tiempo. Entonces, aprende a valorar lo que posees en este instante de tu vida, para que cuando logres lo que deseas, lo puedas disfrutar plenamente. Si no entraras en un juego vicioso, cuando consigues lo que quieres, no lo disfrutaras porque siempre te va a faltar algo para sentirte completo.
Planifica tu día positivo.
Organiza tu día, desarrolla una estrategia para hacer frente a tus problemas, visualiza tus acciones y resuélvelos sin más demoras pues si no lo haces se convierten en pesos que llevas arrastrando a lo largo de la vida y te impiden disfrutar de las pequeñas o grandes cosas del día, pues tu mente se mantiene ocupada en la espiral de preocupaciones generadas por estos asuntos que no resuelves.
Mantén tu mente centrada en las cosas importantes.
Establece tus objetivos y prioridades de lo que piensas hacer. Concéntrate en las cosas que necesitas tomar en serio, pero al mismo tiempo, relájate y disfruta de lo que estás viviendo. De esta manera, los resultados serán favorables para ti.
 
Acepta tus resultados.
Muchas veces pensamos que las cosas van a salir de una cierta manera y no salen. Debemos aprender a tener una alta tolerancia a la frustración. Si la tenemos nos ayudará a crecer pues no veremos las cosas que no nos salen bien como una derrota sino como una forma no acertada para nosotros de realizar las cosas y podremos continuar perseverando hasta conseguirlas. Esta actitud nos hará grandes en la vida.
 Aprende cosas nuevas y toma retos positivos.
La actitud frente a la vida como un aprendizaje constante nos hace vivir los cambios como algo estimulante y positivo. Nos permite vivirlos como oportunidades donde expresar lo mejor de nosotros mismos. Incluye alguna variación en tus rutinas si puedes diariamente. Como conocer a alguien, cambiar el trayecto que realizas para ir al trabajo etc. Estas variaciones te permitirán ser cada día más creativo y tu positividad fluirá espontáneamente.
Deshazte de la dualidad.
Debemos aprender a vivir sin dualidad, desligarnos de los parámetros de bueno-malo, verdad-mentira, hombre-mujer, comprender que la vida es mucho más amplia que todo eso. En el momento en que lo hagamos nos volveremos más libres, no nos juzgaremos ni a nosotros mismos ni a los demás. Descansaremos pues no arremeteremos con crueldad contra nosotros y nuestra autoestima se regenerará.
Se realista.
Asegúrate de que lo que deseas es posible. Nuestros objetivos han de ser realistas, deben ser posibles alcanzarlos, si son excesivamente costosos y no los conseguimos nos causarán frustración y desistiremos. Pensemos en pequeños retos totalmente asumibles con esta forma de actuar se acrecentará nuestra confianza en nosotros mismos por que nos hará sentir que somos capaces y cada día sentiremos la dicha del logro.
Conócete a ti mismo.
Descúbrete a ti mismo que es realmente lo que te gusta y lo que no. Si hay cosas que realizas por los demás, por compromisos empieza a deshacerte de ellas, notarás una liberación interior y cada día serás más autentico.
Relaciónate con gente positiva.
La gente positiva es aquella que te valora y te permite crecer, respeta tus opiniones y tu forma de ver el mundo sin imponer en ningún momento la suya. Despréndete de la gente tóxica que se aprovecha de tus puntos o momentos difíciles para beneficiarse ellos sin pensar en ningún momento en tus consecuencias. Desintoxícate de todos ellos, verás como tu vida prospera cada día más.
Abre tu mente y hazla flexible.
Debemos entender que no poseemos la verdad absoluta, que cada uno de nosotros posee su propia verdad pues vive su realidad. Debemos abrir nuestra mente a nuevas ideas y a información útil que se nos presente, permitir modificar los esquemas mentales anquilosados e inútiles que nos bloquean el avance diario.
Perdona y olvida.
Perdónate a ti mismo, aprende a aceptar que eres un ser humano y que puedes equivocarte cuando tomas decisiones, entonces el camino te resultara más fácil. Aprendemos a través del ensayo y el error y de la observación. Y en el error está el avance si lo comprendemos. El perdonarse y el perdonar nos ayuda a sanar nuestras heridas más profundas.
Higiene del sueño
Al final de cada día, antes de irte a dormir, deshazte de todo lo negativo que acumulaste, preocupaciones, frustraciones etc. Imagina como al meterte en la cama una luz blanca, pura entra por tu coronilla y va limpiando todo tu cuerpo de la cabeza a los pies depurándote de todos los pensamientos y emociones negativos, te sentirás aliviado y entrarás en un estado de relajación profunda que te permitirá tener un sueño positivo y reparador.


Núria Marco Raga
Siempre contigo